En
cada instante y en cada pensamiento que me das, surge emergente la fuente
necesaria para que mis palabras reflejen lo que siento por vos, mi supremo
coraz�n alado.
Un instante de tu ternura basta para que sea alimentada eternamente de amor mi
alma y yo s�lo te lo devuelvo en la gratitud que queda inmersa en cada una de
mis palabras.
Escribirle a la suprema ternura de tu alma, y al sublime encanto de tu cari�o,
es muy f�cil, mi gran ilusi�n corporificada en el amor.
Tu belleza no se compara ni a la misma rosa en flor , pero igual debe ser
primorosa la que se posa enfrente de tus ojos porque el color del cielo se
refleja en ellos y elevas lo que ves al para�so con tu solo pensamiento. Me
gustar�a navegarte en los colores de tus ternuras para que descubra el universo
que emerge de tu alma.
Para adorarte es que existo siempre, para fundirme en la persecuci�n de cada
uno de tus suspiros es que son todos mis esfuerzos, no existe mujer m�s hermosa
que la que nace de tus ojos, preciosa flor celestial de los ensue�os del amor.